Por JAIME ALBORNOZ Cuando la existencia de algún ciudadano llega a su fin, el agente de ventas de una funeraria huele a kilómetros a su clientela. José se desempeña como “Buitre” en las cercanías del Servicio Medico Legal donde ronda hace más de 30 años y nos cuenta de las alternativas que ofrece, en el negocio de la muerte.
Es fácil reconocer a un buitre entre los desconsolados familiares que esperan el cuerpo de algún ser querido, en las afueras del Medico Legal. El buitre es el único sujeto que lleva vestón negro, corbata ad-hoc y lentes oscuros muy al estilo CNI, mientras que los deudos aún no visten ropa de funeral. Antes de ser entrevistado, el vendedor calvo y de aparentemente unos 50 años se acerca lentamente con un cigarro en la boca a unas mujeres que esperan fuera del recinto con los ojos hinchados. “El buitre” las saluda con rostro afligido y comienza a hablarles de las alterativas que ofrece su empresa con un folleto, sin embargo, una mujer le dice que ya adquirió un servicio en otra Funeraria.
En un comienzo José, se niega rotundamente a darme una entrevista. Luego que el explico que ni su nombre ni su foto serán publicados en el artículo, accede a contarme tomando una bebida en una fuente de soda, para reivindicar uno de los oficios más mal vistoS de la sociedad. Odia a los periodistas porque según él, generan el odio popular hacia su casta, así que medita cada palabra antes de responder con una voz carrasposa, seguramente por su gran adicción a la nicotina.
¿Hace cuanto tiempo eres “Buitre”?
Mire, para empezar, a mi no me gusta ese nombre, porque el buitre es un ave de carroña que se sirve del muerto y nosotros lo que hacemos es brindar un servicio a un muerto, pese a que haya plata involucrada. La idea es hacer que se sufra menos en un trámite lo más expedito. Encuentro feo y despectivo ese apodo, lo que hace que se mire mal nuestro trabajo. Yo soy agente de ventas de la funeraria y al igual que en cualquier tipo de negocios trato de brindar el mejor servicio a mis clientes. Trabajo hace más de 30 años en esto y lo hago de la manera más respetuosa posible, ya que este tipo de situaciones son muy delicadas, cualquier gesto imprudente puede desatar el enojo del cliente.
¿Y como reaccionan los familiares de los fallecidos, cuando te acercas a ofrecer tus servicios?
Hay de todo. La mayoría está en estado de shock, por lo que trato de hablar con el que parece menos afectado. Hay que ser sumamente cuidadoso y siempre dar el pésame antes de iniciar cualquier dialogo con el cliente. Hay gente que reacciona muy mal, me han pegado muchas veces, me han amenazado con armas incluso. Es muy complicado porque hay gente que se altera mucho y a uno lo tratan de sinvergüenza, pero lo mío es un trabajo como cualquier otro. A un colega lo mataron hace un par de años, yo lo ví con mis propios ojos, así que trato de tener mucho cuidado.
Cuando logras establecer una comunicación, ¿qué les dices a tus clientes?
Bueno ahí empiezo a darle alternativas económicas pero de buena calidad, sobre todo en el precio, porque la competencia a veces se aprovecha y suben demasiado los precios Como los pillan volando bajo la gente acepta. Yo le ofrezco diversos “pack” que incluyen el ataúd y carroza. Yo tengo los más baratos, por eso me va bien gracias a dios.
¿Y que tipo de gente es la que te compra estos servicios?
La gente más humilde, nosotros nos caracterizamos por ofrecer alternativas a la gente que no puede gastar grandes sumas de dinero, pero sin embargo requieren un producto de calidad. Así llego yo y ofrezco pack desde los 100 mil pesos.
Eso es barato, ¿y es confiable la calidad de las urnas?
Muy buena calidad, trabajamos con madera chilena, los fabricamos nosotros. Jamás hemos recibido un reclamo. Son ataúdes muy elegantes y lo mejor de todo que son económicos, además ofrecemos diseños personalizados.
¿Qué tipo de diseños?
Los más populares son los de equipos, del Colo y de La U, hemos hecho hartos. Generalmente los mismos cabros de las barras los compran para compañeros fallecidos, los del Colo son los que más se venden, pero pintamos del equipo que nos pidan. Una vez tuvimos que pintar uno entero de rosado (risas) era para un colita que mataron cuando se prostituía. Los mismos travestís hicieron la colecta y mandaron a hacerlo, nos quedó re bonito; él siempre le decía a sus amigos que si moría quería que o enterraran en un ataúd rosado y se cumplió su deseo. Bueno también vendemos modelos ultra simples, el puro armazón casi, ya que es para gente de muy bajos recursos, ese lo tenemos a 50 luquitas y se vende bien. Esos son para la gente más pobre, pero no por eso van a tener un funeral indigno.
Vendes harto entonces, ¿tienes algún tipo de contacto dentro del SML?
Sí, mira gracias a dios, no me quejo. Yo gano por comisión, más bonos y por suerte tengo el don de vender harto. Le doy confianza a la gente, no como otros vendedores que son poco atinados o medios tránfugos, que andan hinchando a cada rato a la gente. Hay que hacer lo menos de escándalo posible, pasar piola como se dice. Aparte hay harta competencia desleal, sobre todo de organizaciones religiosas que se meten en el rubro que arman puro atado por inexperiencia. Si fíjate que hasta estuvo el cura Jolo acá afuera vendiendo servicios y lo grabaron para un canal de televisión dejándonos a todos como “chaleco de mono". Ese es un desprestigio muy grande para nosotros, ya que en muchas ocasiones nos han querido impedir que trabajemos acá afuera, de ves en cuando se ponen pesados los del servicio.
Por suerte yo tengo un contacto dentro que me mantiene informado pero nada más que eso, todo lo demás lo hago yo solito, así que voy directo donde los clientes específicos. No ando “dando jugo” como otros, sé al tiro a quien venderle y a quién no.
¿Qué significa la muerte para ti?, si tomamos en cuenta que es tu fuente de trabajo
Es un gran desafío para mí, porque veo mucho dolor a diario y ya que soy muy cristiano trato de ser solidario con el próximo. Me lo tomo con mucha responsabilidad, ya que, el funeral debe ser el broche de oro para el final de la vida de cualquier persona, es el último evento que se produce y como los familiares no tienen la fuerza para encargarse, trato de hacer que se sufra lo menos posible.
¿Y para tu muerte que tienes pensado?
Mis hijos saben que quiero que me entierren en un modelo hecho de Avellano, una madera que me gusta muchísimo, fina y no tan cara. Siempre me imagino como sería mi funeral. Cuando jubile la última gestión que quiero hacer es dejar listo mi funeral y el de mi mujer, para que mis hijos no tengan que encargarse de nada, espero que vaya harta gente eso sí, últimamente he visto funerales con muy poca gente y eso es bien triste. No me considero un gallo malo, pero espero que vaya harta gente a despedirme, por último contratar un grupo de lloronas que es lo que se usa en México (risas). |